Por: Gerardo Juarez | @gerardogayo
Siete Catorce, promesa tijuanense, nos obsequió anteriormente una primera producción bastante controversial, con una escalofriante historia muy acorde al ruidosón. No es casualidad que junto a proyectos como Los Macuanos o María y José, estén ganando terreno en gran cantidad de venues al rededor del país. El talento en sus entregas abre puertas.
La clave del proyecto de Siete Catorce, y en general del movimiento ruidosón, es que saben sacar provecho del terror que se vive al norte de México. Estos sonidos quedarán en la posteridad de un lamentable contexto social marcado por la ola de violencia que el país viene arrastrando desde los tiempos del expresidente panista, Felipe Calderón.
Este EP, es violento, oscuro y macabro; la unión de la cumbia y el tribal trasmutan por completo el noise, carta presentación de este género. La música incita al baile desenfrenado y por lapsos bien podría ser el soundtrack de algún filme de suspenso con locación en Tijuana. Escuchar el material en solitario, puede parecer demasiado perturbador e interesante, ¿qué situaciones tan retorcidas podrían pasar por nuestra mente?
Verdad, una de las seis piezas que contiene este EP, deslinda un sampler brutal. De manera subjetiva visualiza una fuerte crítica a los medios de comunicación (en especial a Televisa) ya que estas empresas guardan tantos secretos como el gobierno mismo, gracias al mal uso de la ética de su corporativismo.
En realidad este EP trastorna los sentidos, en tan sólo seis tracks logrará colapsar tu cabeza, sacando gran cantidad de sensaciones y emociones un tanto oscuras. Sin darte cuenta estarás reproduciendo de nuevo el material. La portada del disco (palmera en llamas en un cielo que no le deja nada a la esperanza), incita al frenesí veraniego, ¿hasta dónde llegarían tus pensamientos? Tal vez, tú podrías ser el siguiente en arder en llamas…
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