Fotos: Franccel Hernández
The Kooks continúa con la promoción de su álbum Listen, debido a esto regresaron este año para dar un par de conciertos en nuestro país empezando por el D.F. para después hacer lo propio en Guadalajara y Monterrey.
The Kooks continúa con la promoción de su álbum Listen, debido a esto regresaron este año para dar un par de conciertos en nuestro país empezando por el D.F. para después hacer lo propio en Guadalajara y Monterrey.
Estos chicos, originarios de Brighton, Inglaterra, siempre nos han incluido en sus giras y es algo que se agradece. Desde su primer disco Inside In/Inside Out (2006) tuvimos la oportunidad de ver sus inicios gracias al festival, ya extinto, Motorokr Fest en el 2008 donde pudimos ver a una banda todavía inexperta pero con un talento innegable.
Los años pasaron y así vinieron tres discos más entre experiencias y festivales por todo el mundo dándoles una notable madurez, acto que por su puesto se ve reflejado en su espectáculo en vivo hoy en día y la noche de ayer fue un gran ejemplo.
El lugar que los recibió esta ocasión fue el Pepsi Center, venue que tiene un encanto que te permite apreciar al artista en donde sea que te encuentres, lo cual hace que el evento se convierta casi casi en una presentación intima.
Un poco pasadas las ocho y media, Luke Pritchard y compañía salieron al escenario dispuestos a estallar con Around Town canción que entre gritos, aplausos y empujones marcaba el inicio de una noche inolvidable.
Un poco pasadas las ocho y media, Luke Pritchard y compañía salieron al escenario dispuestos a estallar con Around Town canción que entre gritos, aplausos y empujones marcaba el inicio de una noche inolvidable.
Después le seguiría uno de los tracks más coreados de su reportorio: Ooh la, y donde ya se podía sentir que, el fanatismo de las asistentes abarcaba toda la discografía de la banda.
Con Bad Habit la sensualidad comenzó a apoderarse de todos dentro del lugar para después bajarnos la hormona, solo un poco, con Down.
Siguiendo con el momento romántico las parejas se aprovecharon de She Moves In Her Own Way y Eddie’s Gun. Mientras que la parte acústica fue anunciada con los primeros acordes de Seaside y Dreams, donde la banda abandonaría el escenario para que los reflectores hicieran brillar el protagonismo de Luke.
Westside fue una oleada de diversión y baile que vino acompañada, por supuesto, de Always Where I Need to Be. Para este momento parecía que utilizaban canciones de su nuevo material para darle paso a un clásico de sus discos pasados, formula que resultó bien lograda.
Westside fue una oleada de diversión y baile que vino acompañada, por supuesto, de Always Where I Need to Be. Para este momento parecía que utilizaban canciones de su nuevo material para darle paso a un clásico de sus discos pasados, formula que resultó bien lograda.
Y para mostrar que tienen canciones para todo tipo de público llegaron las melodías para aquellos que llevaban el corazón roto: Sway y See the Sun pero para que no nos quedáramos sufriendo nos dieron rápido un levantón con Sofa Song y Forgive & Forget canción que fungiría como el final de la primera parte del concierto.